El arte perdido hace mucho tiempo de practicar la tolerancia

El arte perdido hace mucho tiempo de practicar la tolerancia


“Cuando arrojas una piedra a un árbol, no solo rechaza la piedra, sino que también te da un fruto. No guardes piedras emocionales”.

La tolerancia suele definirse como la capacidad de aceptar la existencia de unos comportamientos y creencias que muchas veces no concuerdan con los que tenemos.

La segunda definición de tolerancia es tener la capacidad de tolerar conceptos e ideas teniendo el corazón y la mente abiertos.

Cuando practicamos la tolerancia conscientemente, en realidad desarrollamos la vibración espiritual, mental y emocional. Entonces, estas frecuencias en realidad nos ayudan a visualizar y manifestar un propósito común para nuestra humanidad. Además, nos hará aprender a convivir comprendiendo, honrando y respetando las diferencias entre nosotros.

En el momento en que la sociedad comienza a ser intolerante entre sí, también se amplían los problemas y distinciones de las opiniones. Todo puede convertirse en un estado volátil sin ninguna compasión o empatía.


El juicio, la intolerancia y el fanatismo también pueden alimentar el fuego de la molestia y la ira de una manera que algunas generaciones de amigos o familiares no sabrán dónde comenzó todo ese odio, o incluso por qué comenzó. Para romper el ciclo tomará algún tiempo.

Al aprender a tolerar las diferencias de los demás, también estamos aprendiendo lo que no se tolerará en el trato injusto o inhumano hacia los humanos. Nunca seas tan tolerante que te impida hablar de lo que no vas a tolerar.

Al comprender las relaciones entre las personas, el compromiso es crucial para hacerlo. Aquellos que lideran el mundo deben tener el deseo de comprometerse si realmente quieren hacer un buen trato que sea para todas las partes.

Sin embargo, cuando una de esas partes rompe alguna promesa, las otras partes pueden perder la tolerancia por algunas prácticas del líder y comenzar a criticar las acciones del líder.

Viajar es algo maravilloso para nuestra alma. A medida que aprendamos mucho más sobre las formas de vida de otras personas en diversas partes del mundo, también creceremos más y más. Independientemente de viajar física o incluso mentalmente, como a través de la amistad en línea o leyendo sobre diferentes culturas, nos brindamos un regalo de tolerancia para nosotros mismos.

A medida que crecemos cada día, aprendemos lo que vamos a hacer y lo que no vamos a tolerar en la vida. Además, elegimos si queremos ser una persona valiente. También probaremos algunas cosas nuevas, iremos a lugares nuevos, y empujaremos nuestras zonas de comodidad sobre la cantidad que tolerarán los botones de ansiedad o miedo antes de enloquecer.

Ser un ejemplo de tolerancia y amor nos va a permitir tocar a otras personas con un mensaje único, así como maravilloso.

Cada uno de nosotros está aquí en una especie de propósito milagroso y ridículo, no importa si entendemos todo o no. Tales lecciones fueron creadas para ser aprendidas o vividas.

Tolerar a otras personas en este mundo en realidad significa que entendemos todo. No importa si estamos de acuerdo con una persona o no, esa persona tiene el derecho y la posibilidad de expresar lo que piensa.

A continuación, la práctica de la tolerancia para que la adoptes:

1. Elige un marco de tiempo para comenzar, digamos cuarenta días, o un período más corto si lo deseas.

2. Escribe un recordatorio para ti misma sobre la práctica de la tolerancia y léelo al menos dos veces al día.

3. Jura que, pase lo que pase, tan pronto como te des cuenta de que surge una emoción negativa, harás todo lo posible por abandonar esa emoción. Recuerda, en esencia, las emociones, como los deseos, son simplemente pensamientos no abandonados.

4. Prométete que no devolverás el abuso con más abuso, la violencia con la violencia, el odio con el odio o cualquier otra emoción negativa con una negativa.

5. Como parte de tu transformación emocional, mientras mantengas la práctica de la tolerancia, no reaccionarás y harás todo lo posible por mantener tu estado de equilibrio.

Puedes repetir la práctica hasta que se convierta en tu hábito.

Recuerda ser tolerante sin expectativas. Es difícil pero factible. Si espera un trato más amable y mejor debido a tu tolerancia, harás que la práctica sea mucho más difícil. Principalmente porque es posible que la otra persona ni siquiera se dé cuenta. De hecho, su tolerancia puede confundirse con tu incompetencia, incapacidad, cobardía o cualquier otra cosa. En ese momento, debes recordar que sus opiniones son un mero reflejo de ellos mismos.

Al principio, las respuestas de los demás te afectarán, pero a medida que continúes con resolución, con una actitud positiva, con conciencia determinada, importará cada vez menos. Algunos simplemente no te dejarán en paz. En ese momento, ejerce tu elección.

Da a los demás la libertad de elegir sus emociones, mientras tú mantienes las tuyas. Lleva a cabo la práctica de la tolerancia con resolución y amarás tu nuevo yo.

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Imagen: Luisa Jung Illustration