El Arte de Dirigir tu propia Vida parte 3/5



Habilidades simbólicas
Quizás ya sea tiempo de reconocer que lo más sutil es lo más poderoso.

Lo interior se manifiesta constantemente en lo exterior. Pero las imágenes inconscientes son una fuerza poderosa que puede boicotear nuestras mejores intenciones. A menudo estas imágenes se construyen sin nuestra participación. Las "visiones inconscientes de las cosas" a veces nacen cuando somos pequeños y perduran hasta que las descubrimos y las cambiamos.

Llamamos habilidades simbólicas a la capacidad de utilizar los símbolos para mejorar. Los símbolos impregnan nuestra vida, gracias a ellos nos comunicamos con el inconsciente. Podríamos definirlos como "imágenes con significado". Podemos utilizar símbolos universales o crear nuestros propios símbolos para facilitar procesos de cambio, minimizar los golpes emocionales o transformar hábitos.

Existen símbolos de muchos tipos: animales que están asociados a cualidades a desarrollar, elementos de la Naturaleza (agua, fuego, tierra...), etc. Cuando queremos algo, podemos crear un símbolo que represente nuestro objetivo, dibujarlo y tenerlo a la vista. Luego dejamos que el inconsciente trabaje.

Saber dialogar con nuestro inconsciente es una de las mejores habilidades de comunicación y un elemento fundamental para el liderazgo personal. Las habilidades simbólicas se engloban dentro de lo que podríamos definir como "El arte de dirigir la atención". Nos convertimos en aquello que contemplamos, y cuando miramos un símbolo estamos comunicándonos directamente con el inconsciente, hablamos su mismo lenguaje.
Podemos utilizar el poder de los símbolos concentrándonos en ellos y visualizándolos con toda la viveza y concentración de la que seamos capaces. Cuando hacemos esta práctica con regularidad, las transformaciones interiores se empiezan a manifestar en el exterior.
Somos muchas cosas al mismo tiempo, una expresión de la complejidad, y vale más reconocerlo y aceptarlo. Cada persona es un mundo compuesto por mundos más pequeños. Tenemos nuestra parte masculina y femenina, consciente e inconsciente, cualidades muy elevadas y también instintos y características de las que nunca nos enorgullecemos. Y todo va en el mismo paquete. Amar a todas nuestras partes por igual es una parte del proceso de la madurez. Dicho esto, necesitamos también hacer un uso de nuestra atención que tenga consecuencias positivas. Para ello, es importante centrarnos en lo positivo que hay en nosotros, en nuestras cualidades y potencialidades.

Ejercicios de habilidades simbólicas
A continuación le proporcionamos algunos ejercicios para mejorar sus habilidades simbólicas.

Ejercicio 1.- Crea un símbolo que represente tu mejor estado de forma física y capacidad intelectual. ¿Cómo te sientes cuando estás en plenitud de facultades? Luego, cuando te sientas cansado, deprimido o en baja forma utiliza el símbolo para recobrar tu paz y tus mejores capacidades. Ejemplos: un sol, un manantial de agua, un águila...

Ejercicio 2.- La Mariposa: imagínate una oruga que se arrastra por una rama de árbol. Poco a poco se va envolviendo en su capullo hasta que queda en su interior. Observa el capullo durante unos instantes. Imagínate que estás dentro del capullo. Está oscuro pero empiezas a notar una energía transformadora. Poco a poco el capullo se abre y la luz penetra.

El capullo se deshace por completo, te sientes libre y un mundo lleno de posibilidades se abre ante ti: ¡puedes volar!

Empiezas tu vuelo y descubres que te has convertido en una mariposa de colores brillantes. Nota el aire puro, la luz cálida del sol. Nota los cambios positivos que has experimentado. Disfruta tu nuevo estado.

Ejercicio 3.- El Dibujo inacabado: el siguiente ejercicio consiste en un dibujo inacabado. A partir de una figura, tenéis que acabar de hacer un dibujo y ponerle un nombre. El ejercicio busca la espontaneidad, no penséis mucho.

Toma lápiz y papel antes de continuar.

Termina el dibujo a partir de la siguiente figura:
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La figura es un punto. ¿Ya has acabado un dibujo a partir de esta figura y le has puesto nombre? El dibujo que has hecho representa la visión de ti mismo. Si no te gusta lo que ha salido, puedes construir un dibujo mejor a partir del punto y recordarlo tanto como puedas. Medita sobre él, colócalo en lugares visibles para que esta nueva imagen se vaya incorporando a tu personalidad.

No conviene ser ni prisioneros de la superficialidad ni tampoco de las profundas y sutiles imágenes


Ejercicio 4.- LO MEJOR DE MI. Siéntate con la espalda recta. Respira profundamente unos momentos, deja salir el aire lentamente. Piensa en lo que crees que hay de mejor en ti. Pueden ser cualidades, habilidades, experiencias, relaciones o sentimientos. Ves repasando todo lo bueno que tienes, tu manera de ser, las amistades...

Crea un símbolo que represente tus mejores cualidades, dibújalo y colócalo en un lugar que esté a la vista. Esta es una forma de gestionar la atención del inconsciente.

Continuará...


Del Taller de Autoestima de Juan Carlos Fernández. Capitulo 53 - Volumén 2