Síguenos en nuestro canal de WhatsAppEl amor propio y el cuidado personal no se trata de ser egocéntrico y egoísta.No se trata de una mentalidad de "yo, yo, yo". No se trata de luchar contra el mundo para expresarnos o para obtener lo que queremos.
El amor propio y el cuidado personal se trata de amarnos a nosotros mismos por lo que somos y tomarnos el tiempo para cuidarnos.¿Qué te encantaría de ti si no hubiera una pequeña voz de duda alrededor de tu oreja? ¿Cómo te cuidarías física y mentalmente con cantidades ilimitadas de tiempo?
El amor propio y el cuidado personal se trata de amarnos a nosotros mismos por lo que somos y tomarnos el tiempo para cuidarnos.¿Qué te encantaría de ti si no hubiera una pequeña voz de duda alrededor de tu oreja? ¿Cómo te cuidarías física y mentalmente con cantidades ilimitadas de tiempo?
El amor propio y el cuidado de sí mismos se trata simplemente de poseer nuestro propio poder, actuar desde un lugar de bondad hacia nosotros y tomarnos el tiempo para recordarnos de este poder y bondad. Ambos son esenciales para vivir una vida feliz y saludable. ¿Qué es egoísta acerca de eso? Cuando practicas estas cosas, los cambios en tu vida comienzan a ocurrir ...
A continuación, 30 cosas que suceden cuando practicamos el amor a sí mismo y el cuidado personal en nuestras vidas diarias.
A continuación, 30 cosas que suceden cuando practicamos el amor a sí mismo y el cuidado personal en nuestras vidas diarias.
Cuando nos amamos y nos preocupamos...
1. Dejamos de compararnos con otros y participar en una competencia hecha por nosotros mismos. Como resultado, siempre seremos suficientes para nosotros y para otros.
2. Reducimos el riesgo de depresión, ansiedad, hipertensión, ataques cardíacos y otros problemas relacionados con el corazón. También puede ayudar a estimular tu sistema inmunológico, disminuyendo las posibilidades de que tenga un resfriado.
3. Abrazamos nuestra realidad y dejamos de culpar y luchar contra ella, esto se vuelve tedioso cuando no te amas y te cuidas a ti mismo.
4. Sabemos que el amor está en cada esquina, no solo por el amor que tenemos por nosotros, sino por el amor que ofrecemos y recibimos de los demás. Este amor crea un mundo más pacífico y acogedor a nuestro alrededor.
5. Comenzamos a vivir una vida de abundancia en cada área de nuestras vidas sin la necesidad de luchar o presionar para obtenerla.
6. Permitimos que ocurra crecimiento en nuestras vidas. Cuanto más crecemos, más difundimos el amor y la alegría.
7. Nos llenamos de energía para volver a vivir, amar, cuidar, ayudar y servir.
8. Nos sentimos seguros al saber que estaremos allí para nosotros mismos a través del viaje de la vida. Cuando otros nos dan la espalda, tenemos el poder de nuestro amor propio que nos ayuda a superar todas las dificultades de la vida.
9. Practicamos más amor y aceptación hacia los demás. Cuando nos amamos y cuidamos a pesar de nuestros defectos, comenzamos a reconocer que los defectos no constituyen a la persona completa. Cuando nos damos cuenta de esto, podemos ser más indulgentes con los defectos de los demás, creciendo para aceptarlos como parte de un paquete completo.
10. Sabemos que los fracasos y los reveses nos acercan un paso más al crecimiento.
11. Sabemos que nuestra importancia no depende de lo que producimos.
12. Sabemos que somos suficientes y no necesitamos probarnos a nosotros mismos
13. Creamos relaciones significativas con más paz y armonía porque proporcionamos a nuestros seres queridos una verdadera representación de nosotros mismos. Cuando no podemos compartir con otros lo que realmente somos, surgen conflictos en nuestras relaciones. Pero cuando podemos compartir nuestro verdadero yo con los demás, nuestros seres queridos pueden ver y entender claramente a la persona que somos.
14. No estamos enfocados en la soledad, en cambio podemos abrazar una conexión más profunda y de unidad con el mundo.
15. Nos sentimos en paz al aceptarnos a nosotros mismos, nuestros puntos fuertes y nuestras debilidades incondicionalmente.
16. Nos convertimos en mejores cuidadores para otros con nuestro espíritu renovado. Cuando tratamos de cuidar a los demás con un espíritu quebrantado, somos ineficaces en el amor y cuidado que brindamos. Una vez que nos equilibremos en el amor y el cuidado que nos brindamos, podemos cuidar mejor a quienes nos rodean
17. Aceptamos los errores y las fallas que conlleva ser humano, invitando a la vulnerabilidad a nuestras vidas.
18. No nos importa lo que otros piensen o digan de nosotros porque sabemos que lo que en última instancia importa más es cómo nos sentimos acerca de nosotros mismos.
19. Somos más resilientes y somos capaces de asumir cualquier desafío que la vida nos pone, viendo estos desafíos como oportunidades para aprender y crecer.
20. Permitimos que nuestro brillo natural se muestre fácilmente porque no tememos mostrar nuestro verdadero yo a los demás. Esto se debe a que amamos a la persona que realmente somos sin el temor y la vergüenza que provienen de ocultar quiénes somos.
21. Nos volvemos mejores solucionadores de problemas porque tendemos a ver el mundo más claramente.
22. Asumimos la responsabilidad de nuestras vidas, dándonos cuenta de que somos la fuente de toda la felicidad.
23. Tenemos el poder de alterar nuestros futuros, carreras, relaciones, pasión, compasión, empatía y autenticidad.
24. No estamos controlados por el miedo porque reconocemos el amor como el poder más fuerte.
25. Sabemos cuál es nuestro propósito y lo vivimos. Nuestro propósito puede ser difícil de encontrar y aceptar cuando no estamos dispuestos a amarnos y cuidarnos de manera adecuada. Una vez que lo hacemos, el propósito de nuestra vida se vuelve mucho más claro y podemos planificar y tomar medidas para cumplirlo.
2. Reducimos el riesgo de depresión, ansiedad, hipertensión, ataques cardíacos y otros problemas relacionados con el corazón. También puede ayudar a estimular tu sistema inmunológico, disminuyendo las posibilidades de que tenga un resfriado.
3. Abrazamos nuestra realidad y dejamos de culpar y luchar contra ella, esto se vuelve tedioso cuando no te amas y te cuidas a ti mismo.
4. Sabemos que el amor está en cada esquina, no solo por el amor que tenemos por nosotros, sino por el amor que ofrecemos y recibimos de los demás. Este amor crea un mundo más pacífico y acogedor a nuestro alrededor.
5. Comenzamos a vivir una vida de abundancia en cada área de nuestras vidas sin la necesidad de luchar o presionar para obtenerla.
6. Permitimos que ocurra crecimiento en nuestras vidas. Cuanto más crecemos, más difundimos el amor y la alegría.
7. Nos llenamos de energía para volver a vivir, amar, cuidar, ayudar y servir.
8. Nos sentimos seguros al saber que estaremos allí para nosotros mismos a través del viaje de la vida. Cuando otros nos dan la espalda, tenemos el poder de nuestro amor propio que nos ayuda a superar todas las dificultades de la vida.
9. Practicamos más amor y aceptación hacia los demás. Cuando nos amamos y cuidamos a pesar de nuestros defectos, comenzamos a reconocer que los defectos no constituyen a la persona completa. Cuando nos damos cuenta de esto, podemos ser más indulgentes con los defectos de los demás, creciendo para aceptarlos como parte de un paquete completo.
10. Sabemos que los fracasos y los reveses nos acercan un paso más al crecimiento.
11. Sabemos que nuestra importancia no depende de lo que producimos.
12. Sabemos que somos suficientes y no necesitamos probarnos a nosotros mismos
13. Creamos relaciones significativas con más paz y armonía porque proporcionamos a nuestros seres queridos una verdadera representación de nosotros mismos. Cuando no podemos compartir con otros lo que realmente somos, surgen conflictos en nuestras relaciones. Pero cuando podemos compartir nuestro verdadero yo con los demás, nuestros seres queridos pueden ver y entender claramente a la persona que somos.
14. No estamos enfocados en la soledad, en cambio podemos abrazar una conexión más profunda y de unidad con el mundo.
15. Nos sentimos en paz al aceptarnos a nosotros mismos, nuestros puntos fuertes y nuestras debilidades incondicionalmente.
17. Aceptamos los errores y las fallas que conlleva ser humano, invitando a la vulnerabilidad a nuestras vidas.
18. No nos importa lo que otros piensen o digan de nosotros porque sabemos que lo que en última instancia importa más es cómo nos sentimos acerca de nosotros mismos.
19. Somos más resilientes y somos capaces de asumir cualquier desafío que la vida nos pone, viendo estos desafíos como oportunidades para aprender y crecer.
20. Permitimos que nuestro brillo natural se muestre fácilmente porque no tememos mostrar nuestro verdadero yo a los demás. Esto se debe a que amamos a la persona que realmente somos sin el temor y la vergüenza que provienen de ocultar quiénes somos.
21. Nos volvemos mejores solucionadores de problemas porque tendemos a ver el mundo más claramente.
22. Asumimos la responsabilidad de nuestras vidas, dándonos cuenta de que somos la fuente de toda la felicidad.
23. Tenemos el poder de alterar nuestros futuros, carreras, relaciones, pasión, compasión, empatía y autenticidad.
24. No estamos controlados por el miedo porque reconocemos el amor como el poder más fuerte.
25. Sabemos cuál es nuestro propósito y lo vivimos. Nuestro propósito puede ser difícil de encontrar y aceptar cuando no estamos dispuestos a amarnos y cuidarnos de manera adecuada. Una vez que lo hacemos, el propósito de nuestra vida se vuelve mucho más claro y podemos planificar y tomar medidas para cumplirlo.
26. Aceptaremos cuando alguien no esté de acuerdo con nosotros y no nos preocupa, ya que reconocemos que todos tienen derecho a sus propios puntos de vista.
27. Reemplazamos la culpa, la vergüenza y la ira con la propiedad y la creación.
28. Cuando te des cuenta de que no hay verdad en nuestros pensamientos estresantes invitamos a la quietud a nuestras vidas.
29. Nos volvemos más creativos, inspirados y abiertos. Como resultado, no solo producimos grandes obras de amor y cuidado, sino que nos volvemos mejores solucionadores de problemas gracias a nuestra conciencia más clara.
30. Inspiramos a otros a amarse y cuidarse a sí mismos. Cuando los demás vean el amor y la atención que nos damos a nosotros mismos, se darán cuenta de las formas en que pueden cambiar sus actitudes y vidas para amarse mejor y cuidarse a sí mismos.
27. Reemplazamos la culpa, la vergüenza y la ira con la propiedad y la creación.
28. Cuando te des cuenta de que no hay verdad en nuestros pensamientos estresantes invitamos a la quietud a nuestras vidas.
29. Nos volvemos más creativos, inspirados y abiertos. Como resultado, no solo producimos grandes obras de amor y cuidado, sino que nos volvemos mejores solucionadores de problemas gracias a nuestra conciencia más clara.
30. Inspiramos a otros a amarse y cuidarse a sí mismos. Cuando los demás vean el amor y la atención que nos damos a nosotros mismos, se darán cuenta de las formas en que pueden cambiar sus actitudes y vidas para amarse mejor y cuidarse a sí mismos.
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