✨ 6 sencillos pasos para recargar tu energía espiritual con las manos

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Dentro de todos y cada uno de nosotros está el poder de curar.

Cuando nos cortamos, nuestro cuerpo repara la herida. Cuando lloramos, nuestro corazón y nuestra mente comienzan a calmarse y consolarnos. Todos tenemos esta habilidad curativa innata dentro de nosotros, solo tenemos que recordar que está ahí.

Nuestros cuerpos son increíbles obras de arte. Incluso mientras se sienta aquí leyendo este artículo, cientos de miles de procesos están sucediendo dentro de su cuerpo para mantenerlo funcionando y prosperando.

Una máquina tan inteligente como esta necesita nutrición, cuidado y protección, por eso es primordial tener una buena dieta, ejercicio, aire fresco, mantenerse hidratado y dormir mucho. Pero también tenemos este otro lado que no se puedes ignorar, un lado espiritual que también necesita ser nutrido y cuidado.

De hecho, puedes comer todos los alimentos más saludables del mundo y hacer ejercicio todos los días, pero si no te has dirigido a tu yo espiritual, nunca estarás realmente saludable.

Tu energía espiritual emana de tu cuerpo y te da ese brillo o aura radiante. Es posible que hayas sido testigo de este brillo o aura en ti o en otros. Es posible que incluso lo hayas sentido radiante desde tu rostro hacia el mundo.

Tu energía espiritual necesita ser cuidada, nutrida y protegida tanto como tu cuerpo físico, pero muy a menudo es descuidada o ignorada. Muy a menudo fallamos en sintonizarnos con nuestro yo espiritual y realmente honramos este lado energético de nosotros.

Este lado energético de nosotros gobierna nuestra intuición y es nuestra brújula interna. Nos ayuda a sentirnos conectados con algo más grande que nosotros mismos y nos ayuda a guiarnos a través de todas las decisiones de la vida.

Si te siente agotad@ a pesar de dormir bien, si está luchando por encontrar la alegría a pesar de que todo en tu vida va bien, podría ser porque necesitas restaurar y reponer esa energía espiritual.

Otras señales que necesita restaurar tu energía espiritual:

1. Sentirte fuera de lugar o como si no perteneciera
2. Falta de entusiasmo por tu vida a pesar de estar logrando tus metas
3. Sintiendo que te falta un propósito
4. Querer sentir, ver y comprender la vida a un nivel mucho más profundo.
5. Sentirte constantemente estresado o ansioso.

Una forma poderosa de restaurar esta energía espiritual es enviarte sanación a ti mismo. Cualquiera puede hacer esto, y así es como funciona:

Paso 1:

Encuentra un lugar tranquilo donde no te molesten. Acuéstate o siéntate derecho en una silla. Cierra los ojos y respira profundamente cinco veces. Asegúrate de respirar profundamente hacia el abdomen y no solo hacia el pecho.

Paso 2:

Mantén tus manos juntas en posición de oración y presiona suavemente las puntas de los dedos y las palmas juntas. Levante las manos para que toquen el centro de la frente o el tercer ojo y luego bájelas para que toquen el centro de su corazón. El área de la frente y el pecho contienen dos chakras poderosos (tercer ojo y chakra del corazón) y este movimiento ayudará a activarlos.

Paso 3:

Ahora, comienza a frotarte las manos suavemente hasta que haya generado algo de calor. Coloque su mano derecha sobre el centro de su corazón y su mano izquierda sobre su ombligo. Nuevamente, estos son chakras poderosos que se recargarán a través de tus manos.

Paso 4:

Mantén los ojos cerrados, visualiza la luz blanca curativa que sale de tus manos hacia tu cuerpo. Visualiza la luz fluyendo hacia tu cuerpo y sanando, restaurando y recargando todos tus centros de energía.

Visualiza la luz bajando hasta la punta de los dedos de los pies y hasta la parte superior de la cabeza. Incluso, puedes visualizar la luz blanca que irradia de tu cuerpo y forma un brillo protector a tu alrededor.

Paso # 5:

Cuando sientas que has recibido suficiente energía de luz blanca, abre los ojos y agita suavemente las manos. Párete y sacude suavemente tu cuerpo o haz algunos estiramientos ligeros solo para que tu sangre se mueva.

Paso # 6:

Bebe un gran vaso de agua y asegúrate de mantenerte hidratado durante el resto del día.

Esta es una manera muy rápida y fácil de enviar energía curativa a tu cuerpo y te ayudará a recargar instantáneamente tu energía espiritual. Para obtener los mejores resultados, realiza la curación todos los días durante una semana durante al menos 15 minutos.

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