Re-programando tu mente parte III

Re-programando tu mente parte III




Ahora, vamos a hacer un Acceso Auditivo.

Los auditivos miran hacia los lados para manejar su mente, porque esas son las zonas del cerebro que se usan para recordar y generar imágenes.

Mira ahora hacia la izquierda, tal y como si quisieras "mirar tu oreja" y recuerda la voz de tu madre.

Verás que es muy sencillo tener recuerdos auditivos de esta manera.
Si quieres "generar" una voz nueva, o crear algo de música, puedes mirar a tu oreja derecha.

Esto no te extrañará, porque ya aprendiste que el cerebro Izquierdo es el Lógico, y el derecho el Creativo. Así que si quieres "crear" algo nuevo, tendrás que mirar a la derecha.
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Hazlo Ahora
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Ahora vamos a imitar la forma de usar el subconsciente de una persona Visual. Para hacerlo miraremos "hacia arriba" como si quisiéramos ver el cerebro que hay encima de nuestros ojos. ¿De acuerdo?

Ahora mira arriba a la izquierda para "recordar" como es un Elefante. ¿De acuerdo? Simplemente miras arriba, todo a la izquierda y le pides a la parte lógica de tu cerebro visual que te diga como es un elefante. Pronto "verás" dentro de tu mente un elefante Gris ¿Verdad?

Ahora vamos a "crear nuevas imagines", lo cual se hace arriba a la Derecha, es decir "mirando" al Cerebro Creativo.

Por ejemplo, mira arriba a la derecha e imagina un elefante.

¿Ya lo has hecho?

Ahora cámbiale el Color y hazlo Rosa. ¿Ves que fácil?

Visualizar, mirando arriba a la derecha es extremadamente fácil, porque es la parte del cerebro que se usa para hacer las visualizaciones.

Todo el mundo maneja así la mente, sólo que lo hace sin darse cuenta de como lo hace.

Estos conocimientos te serán muy prácticos para poder hacer las Visualizaciones de Ejercicios del curso.

¡Recuerda! Si tienes que "Visualizar algo" y te cuesta, mira MÁS ARRIBA y MÁS A LA DERECHA, y te será sencillo.

Si necesitas "añadir un sentimiento a tu visualización" mira hacia abajo hasta que "encuentres" ese sentimiento y luego mira otra vez hacia arriba para añadirlo a la imagen.
Y si quieres añadir algún sonido, simplemente mira hacia tus orejas para encontrarlo ^_^ Luego acuérdate de mirar de nuevo hacia la imagen para no "pederla".

¡Verás como con un poco de práctica te será muy sencillo!

Las creencias más importantes de tu vida, las que determinan tu existencia, han sido aprendidas por convicción. Has sido convencido de su veracidad, sin la posibilidad de verificarlas directamente.

Si alguna vez te has dicho: ''No sirvo para nada" o "Nunca logro lo que me propongo" o "La vida es siempre difícil". Lo has hecho siguiendo ese tipo de creencias. Tal vez haya habido circunstancias que las confirmen pero, la mayoría de las veces ¡las has creado tú mismo! Y lo seguirás haciendo hasta que las cambies.

Existen dos técnicas muy poderosas para crear nuevas creencias:
a) Afirmaciones y b) Meditación guiada.

Las afirmaciones:
Para explicarte qué son las afirmaciones quiero hablarte un poco acerca de cómo es que aprendemos:

Tu cerebro es como una potente grabadora, de hecho, la memoria trabaja igual que los carretees y los disquetes de computadora; guardando información por medio de impulsos eléctricos. A los enfermos mentales graves, cuando están obsesionados con pensamientos agresivos o suicidas, les dan choques eléctricos, esto hace que se olviden de esos pensamientos y se calman considerablemente. (como si se les borrara el cassette)

¿Alguna vez has pasado un cassette cerca de un imán? Si no lo has hecho te voy a decir que pasa: !Se pierde toda la información!. Lo que hacen las grabadoras y computadoras es que, por medio de impulsos eléctricos acomodan las pequeñas partículas metálicas que se encuentran sobre la cinta y así almacenan la información.

Bien, tu cerebro está formado por billones de células llamadas neuronas y que guardan todo lo que sabes. La diferencia es que no se guarda la información acomodando las neuronas sino, conectándolas unas con otras (esta conexión es llamada sinapsis).

Conectando varios millones de neuronas aprendiste a leer, conectando otros millones aprendiste a escribir y conectando otros cuantos has aprendido todo lo que sabes hoy.
¿Sabías que con la tecnología que tenemos hoy, se necesitaría una computadora del tamaño de un edificio de 10 pisos para poder almacenar toda la información que tú puedes almacenar en tu cerebro?

Si no lo sabías, has conectado unas miles de neuronas y ahora ya lo sabes. Si ya lo sabías ahora lo sabes más.

¿Cómo está eso de que ya lo sé más? Permíteme explicarte:

Tenemos dos tipos de memoria, una temporal o de corto plazo y una definitiva, de largo plazo. En la de corto plazo, se guarda todo lo que oyes, hueles, sientes, ves, haces y piensas, pero que después se olvida.

¿Cómo se olvida?
Muy sencillo la conexión hecha de "neuronas no es tan fuerte.

Esto es indispensable para poder sobrevivir porque cada día recibes muchísima información. Imagínate que un día pudieras recordar todo lo que viste en la televisión, todas las conversaciones que tuviste, todos los anuncios en la calle, todo lo que leíste en el periódico, todos los autos que viste y sus números de matricula, la cara de cada una de las personas que viste en el subterráneo y cómo iban vestidos, en fin, te volverías loco en menos de lo que te imaginas.

La memoria temporal te ayuda a funcionar bien en el mundo porque necesitas recordar dónde dejaste las llaves o que tienes una cita a las cuatro.

En cambio, la memoria de largo plazo guarda toda la información que es indispensable para ti, lo que es realmente importante.

¿Cómo es que esto no lo olvido fácilmente?

Ese es el secreto del aprendizaje: La primera vez que aprendes algo se crea una conexión de neuronas, esto se llama cordón neuronal. Imagínatelo como un cable muy delgado y delicado. Cuando repites eso que aprendiste, esté cordón se hace más grueso y resistente y cada vez que lo repites, se le suma una capa más y luego otra.

El Dr. Johnson dijo: "Las diminutas cadenas de los hábitos son demasiado pequeñas para sentirlas hasta que llegan a ser demasiado fuertes para romperlas"

Pero eso no es todo, tu cerebro no permitirá que se pierda información importante, por eso, además de hacer cordones más gruesos y resistentes, los recubre de una sustancia llamada mielina que los aísla y los protege. Ahora imagínalos como cables de alta tensión recubiertos con un plástico grueso.

Lo que hacías cuando repetías una y otra vez las tablas de multiplicar era crear estos cables y hacerlos más fuertes para que no se te olvidaran.

De esta forma aprendiste absolutamente todo lo que sabes. En tu mente está guardado lo más importante para ti. Ahí está lo que sabes de la vida y más importante: lo que sabes de ti mismo.

Estos cordones neuronales siguen fortaleciéndose todo el tiempo.

Imagínate que hay un cable en tu mente que tiene escrito en su grueso plástico aislante: "Nunca logro lo que me propongo"

Esto es algo a todas luces falso, a lo largo de tu vida has logrado cientos de objetivos. Sin embargo, algún suceso en tu infancia te hizo creer que no lo podías hacer, o alguien te lo repetía constantemente y se te creo ese cordón neuronal. Ese "cable" filtra e influye sobre tus pensamientos y sobre tus actitudes.

Ahora imagina que tienes un proyecto para un negocio, planeas todo muy bien, piensas en todas las posibilidades y, a pesar de tus creencias, te animas a emprenderlo.

Todo va bien en un principio pero tu "cable" se pone a trabajar: "¡Rey! ¿Qué te pasa? ¿Cómo es que quieres hacer un negocio si tú no puedes lograr nada? Ya verás que algo sale mal".

Con este pensamiento constante en tu mente, descuidas algún detalle o algo fuera de tu control, sale mal.

Tu "cable" se pone en acción: "Te lo dije, tú no puedes lograr nada, mejor ríndete, no tiene caso"

Te desilusionas y te rindes, ¡se cumplió la profecía! Tu mente ha confirmado tu creencia, "Nunca logras lo que te propones".

Cada experiencia que tú mismo provocas que confirme esa creencia le hace más fuerte.

Lo que hacen las afirmaciones es crear nuevos aprendizajes, nuevos "cables" - Estas nuevas conexiones neuronales, en lugar de frenar tu desarrollo, te llenarán de fuerza y de confianza en ti mismo. Estarás creando unos cables positivos, fuertes y gruesos que se fortalezcan a sí mismos con cada nueva experiencia.

Vas a crear un cable "Yo puedo lograr cualquier cosa que me proponga", otro "Persisto hasta que lo logro" otro "Los problemas son oportunidades" otro "Nunca me rindo" y así, otros cientos de cables que cambien tu vida por completo.


Estos nuevos aprendizajes se irán reforzando diariamente con tus propios pensamientos y con las experiencias que crearán estos nuevos pensamientos, el funcionamiento de tu mente cambiará a uno que te permita ver, sentir y vivir cualquier cosa que los refuerce.
¡Es una reacción en cadena!

Continuará...

Del Taller de Autoestima Volumén 1 de Juan Carlos Fernández. Capítulo 46. Volúmen 1: Re-programando tu mente