Cuando las cosas vayan mal como a veces pasa, cuando el camino parezca cuesta arriba, cuando tus recursos no alcancen y tus deudas suban, cuando quieres sonreír, y sólo suspiras, cuando tus preocupaciones te tengan agobiado, descansa si te urge, pero no te rindas.
La vida es rara con sus vueltas y tumbos. A veces comprobamos que muchos fracasos suelen acontecer, aún pudiendo vencer, y haber perseverado.
Así es que no te rindas... Aunque el paso sea lento, el triunfo puede estar a la vuelta de la esquina.
Por eso, decídete a luchar sin duda, porque en verdad, cuando todo empeora, el que es valiente, no se rinde... ¡Lucha!
Si te gustó este artículo, COMPARTE con tus amigos
Desconozco el autor
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp