El Universo siempre responde a nuestras oraciones, dándonos exactamente lo que pedimos.
Esto implica que obtenemos lo que solicitamos, y esta ley es infalible.
Sin embargo, a menudo parece que no recibimos lo que queremos, lo cual puede deberse a dos razones principales:
Enfoque Contradictorio
Por ejemplo, si deseas enriquecerte pero constantemente te preocupas por tu situación económica actual, en realidad estás pidiendo pobreza de manera más enfática que riqueza. El Universo, entonces, responde al deseo que presentas con mayor intensidad.

Falta de claridad
Si tus deseos no son claros, tanto tu energía como la universal se dispersan, diluyendo el mensaje.
Aquí te ofrezco una manera sencilla de clarificar tus deseos al Universo y trabajar conjuntamente para hacerlos realidad:
1. Define tu deseo
Elige algo que realmente desees y creas que puedes lograr. Si no crees en la posibilidad de alcanzar tu deseo, es poco probable que se materialice.
2. Especifícalo
Escribe en un papel lo que quieres recibir, con todos los detalles posibles. Usa afirmaciones como "Voy a recibir..." en lugar de "Me gustaría tener...".
3. Acción concreta
Determina qué puedes y estás dispuesto a hacer para alcanzar tu objetivo. No subestimes ninguna acción, por pequeña que sea.
4. Visualización y acción
Dedica tiempo cada día para leer tus anotaciones y visualizarte alcanzando tu deseo. Mantén el compromiso con las acciones que has decidido emprender.
Siguiendo estos pasos, y siendo sincero en tus esfuerzos, el Universo se alineará para ayudarte a lograr tus metas.
Por Sandra V.
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